sábado, 25 de febrero de 2012

El mingitorio municipal

El Ayuntamiento, con exquisita sensibilidad hacia los que utilizamos el paseo del bide gorri, nos inaugura un moderno mingitorio público anexo a las nuevas instalaciones gimnásticas al lado del río, lo que nunca está de más ya que un apretón inoportuno lo tiene cualquiera, más aún paseando o haciendo ejercicio. Tengo que decir que me parece estupendo, con el enmarcado con acero a prueba de vándalos, el diseño cúbico que sugiere un mini-Kursaal del pipí y la pared enyesada donde en caso de urgencia podremos recrear la carátula del "Who's next". De los vándalos nos ocuparemos otro día, hoy les toca a los mingitorios.

El nuevo y estupendo mingitorio municipal. Foto: B.R. el Blog de Bernar

A pesar de la modestia de este acto, hacer pipí en un mingitorio municipal tiene un no se qué de aventura y morbo que me hace cosquillas en el estómago. Esos ingeniosos grafitis, esas curiosas calcificaciones que forman las sales de millares de pises meados unos sobre otros a lo largo de años de uso, esos hallazgos fascinantes de restos de vicio y abandono personal que relatan tantas historias inconfesables de los usuarios, esos aromas a chorra rancia que inunda el lugar de "nosotros" y a chumino ahumado que sale del lado de "ellas" que encontramos en estos lugares, nos detienen en el tiempo, de regreso a lugares comunes de oscuros y gratificantes placeres.

Ah. mear, mear, qué gustirrinín. ¡Aaaaaaaahhh!.

En el mingitorio municipal lo mejor es entrar a reventar de ganas y disparar un chorro de pipí a toda presión contra el acero inoxidable sin temor de salpicar el baño de casa. En el mingitorio municipal te puedes vaciar a gusto y sin miramientos exhalando un alegre oh-la-lá de placer infantil y voluptuoso, quedándote satisfecho de verdad. Puedes incluso entrar empalmado dándole al asunto un extra de presión hidráulica y acelerando el placer obtenido hasta un clímax insospechado. Todos los hombres, especialmente los afortunados que poseemos una buena verga, conocemos el intenso placer que produce una buena meada aún sosteniendo la erección, después de un coito prolongado. Incluso muchos hombres prefieren tener relaciones con sus parejas aguantándose las ganas de hacer pis, sabiendo lo que viene después.

Dándole vueltas al tema, pronto llegué a la cuestión histórica de los mingitorios municipales en nuestro pueblo. Recuerdo al menos tres. Luego pusieron el del Zelay-aristi que estuvo hasta la actual remodelación. Fue además el mejor de todos, se notaba que había una empleada cuidándolo permantemente y estaba siempre limpio y fresco.

Ahí donde lo ven, esto antes era un lúgubre mingitorio público.
Foto: B.R. el Blog de Bernar

Había un mingitorio municipal en las escaleras que suben a la cafetería Hiruki, justo en el lugar que ahora ocupa un evocador cisne de bronce. Era el más oscuro, muy frio en invierno, nunca tenía iluminación y hacer pis allí sin luz alguna en las gélidas noches de Enero o Febrero, era casi espeleología. Apestaba a orines rancios y no tenía o no se veía, sanitario de loza; se proyectaba el chorro tenso y humeante rompiendo directo sobre el mármol, cemento, baldosín o lo que fuera la desconocida materia que componía aquello. Además estaba ya tan baqueteado por el tiempo que el suelo estaba levantado y costaba mantener el equilibrio allí dentro sin tocar nada. Siempre estaba concurrido y solía verse un reguero de pipí verdiamarillento que corría hasta la rejilla del arco de entrada a la plaza, arrastrando en su corriente, como barquichuelas a merced de una súbita crecida, cáscaras de pipas y cacahuetes.

Pero nada podía compararse al lúgubre mingitorio municipal de Villarreal de Urrechua, al lado de la antigua peluquería de Babiano, en la esquina del Aldapa. Clausurado a finales de los ochenta, era un clásico del género negro, con cañerías oxidadas, sanitarios mohosos, suelo de cemento encharcado y negruzcas paredes rezumantes de humedad. Un miasma infernal y dolorosamente penetrante se desprendía de aquel  lugar siniestro donde ni el zotal conseguía mitigar la permanente infección. Para terminar el cuadro, solía ser el picadero favorito de los yonquis locales que cuando terminaban la faena vaciaban contra la pared los restos sanguinolentos de la jeringuilla. Fuera uno a lo que fuera, no era conveniente ser visto saliendo de allí.

El evocador cisne, con su bien dotado y potente chorro, como
 recuerdo de tantos felices momentos. Foto: B.R. el Blog de Bernar

También hubo un mingitorio municipal junto a la casa de Busca Isusi, tras el frontón, en la calle Jai-alai.  Era de ladrillo rojo y a pesar de la mugre, el polvo acumulado y las negras telarañas, estaba en mucho mejor estado que los otros, pero no podríamos compararlo con los elegantes mingitorios actuales, llenos de comodidades, junto al aparcamiento subterráneo que por cierto, ya empiezan a padecer la mala educación clásica en nuestro pueblo. Esperemos que el nuevo mingitorio municipal del paseo tenga mejor suerte. Yo ya lo he probado. El otro día eché una de las buenas allí y también una larga meada. Un completo, vamos. Me quedé como un señor. En el mingitorio municipal.

domingo, 19 de febrero de 2012

Enfermedades para hipocondríacos: el Tétanos

Opistotonos o posición arqueada: soldado afectado por el tétanos.
Colonizando la tierra, especialmente la de cultivo, el estiércol y la herrumbre, la porquería de debajo de las uñas con mala higiene, la boca de los humanos y de los animales salvajes, los utensilios afilados sin limpiar y una interminable lista de lugares de todo el mundo donde prolifera cómodamente, nos espera la bacteria Clostridium tetani, dispuesta a invadir nuestro cuerpo entrando por la puerta grande de una herida infectada y una vez establecida su población en nuestro sistema nervioso central, provocarnos una de las enfermedades agudas más tremebundas y devastadoras que la Humanidad conoce: el terrible Tétanos.

Clostridium tetani, es la bacteria causante de la enfermedad.

A todos nos han tenido que vacunar una o varias veces a lo largo de nuestra vida contra esta bacteria, la típica situación de haberse caido uno con la bici en la tierra o haberse cortado con un alambre de espino oxidado. Nos creemos tan inmunizados que pasamos por alto lo fácil que es en realidad contraer Tétanos con cualquier herida que nos hagamos, dado que el germen patógeno se encuentra en los lugares sucios de todo el mundo, incluso sobre nuestra piel sin lavar. Unas profesiones tienen más riesgo que otras pero cualquier persona lo puede contraer. Es una enfermedad universal. Para que la próxima vez que les vayan a pinchar no les parezca una molestia innecesaria, sepan lo que se juegan con ella.
 
El Tétanos es una enfermedad espantosa, con síntomas espectacularmente dramáticos que impresionan al más valiente. Todo es extremo en esta enfermedad, desde las primeras manifestaciones hasta los dolores, sufrimiento y duración de la misma. La mortalidad de los pacientes adultos suele ser alta, hasta del 20% en los países desarrollados y superando el 50% en los hospitales de países en vías de desarrollo donde otra modalidad de la enfermedad, el tétanos neonatal contraido al cortar el cordón umbilical, diezma a la población infantil siendo un problema sanitario de primer orden y un indicador de desarrollo de los países. Es además una enfermedad de declaración obligatoria a las autoridades.

Fascies tetánica o risa sardónica producida por la contracción de la
mandíbula.

La bacteria causante, Clostridium tetani, se instala en el sistema nervioso central y produce una de las toxinas más potentes conocidas, la tetanospasmina, una neurotoxina sólo superada en toxicidad por la toxina botulínica y la de la disentería. La herida de entrada debe ser profunda, anfractuosa y con presencia de cuerpos extraños y fenómenos locales de necrosis. La incubación puede ser desde 24 horas a varios días, semanas e incluso meses; generalmente, cuanto más corta sea la incubación peor pronóstico tiene la enfermedad, siendo los casos más leves los de incubación más larga. Un tétanos que se manifiesta a las cuatro semanas de haber sido contraído, apenas afectará al miembro donde está la herida causante. Por el contrario, si los primeros síntomas aparecen en los tres primeros días, el paciente deberá ser hospitalizado en una UCI y si es creyente, se buscará a un sacerdote que le administre la Extrema Unción.
 
El Tétanos comienza como muchas enfermedades:insomnio, disfagia, raquialgia, rigidez de nuca y dificultad para la marcha . Pronto aparece el primer síntoma que además es el que más claramente diagnostica la enfermedad, ya que no se da en ningún otro cuadro clínico: la contracción de la mandíbula o trismo que impide al enfermo hablar, masticar o deglutir alimentos. El tétanos sin trismo es muy raro. El trismo también impide obtener una vía aérea por lo que se suele recurrir a la traqueostomía.

Mortalidad infantil: es un problema sanitario de primer orden
en paises en vías de desarrollo. Niña afectada.

Al poco, aparecen la rigidez del cuello y nuca y las contracciones musculares incontroladas. Estas son descendentes, comienzan en cuello, nuca y hombros, terminando por afectar al resto del cuerpo que se contrae espantosamente. Además son extremadamente dolorosas. El enfermo adopta una posición arqueada característica que se conoce como opistotonos. En los casos más graves se puede observar al paciente grotescamente apoyado a modo de puente en la nuca y los talones. Los esfínteres responsables de las funciones excretoras también se contraen por lo que el paciente sufre de retención de orina y heces. En algunos casos, se cagan y mean sin control al no poder gobernar sus funciones.

Trismo o contracción de la mandíbula, un sín-
toma emblemático de esta enfermedad.

El trismo además evoluciona a un síntoma aún más horroroso: la risa sardónica o fascies tetánica, característica también del Tétanos. La contracción involuntaria de la cara produce un aspecto de risa forzada verdaderamente patético, ya que se ve la mitad inferior del rostro reír y la mitad superior llorar. La expresión facial de un enfermo de Tétanos es algo dificil de olvidar.
Los episodios de contractura general se repiten de vez en cuando y duran varios minutos en los que el enfermo sufre de una manera espeluznante, arqueándose involuntariamente entre lúgubres alaridos producidos por los  intensísimos dolores de la contractura muscular. Hay una contractura permanente y sobre ella se sobreponen atroces paroxismos en los que todos los músculos del cuerpo se contraen con tanta fuerza que suelen producir fracturas en los huesos. Todos hemos sufrido alguna vez un tirón leve en la pierna o en la espalda y eso sólo afecta a un músculo, imagínenselo en todos los músculos a la vez, de arriba abajo, oyendo el siniestro chasquido de los huesos al romperse por la presión. Además se pueden ver afectados los músculos implicados en la respiración; aparece taquicardia, arritmia, sudoración con hiperpirexia, cianosis y shock. Si ocurre esto con fiebre alta, el pronóstico es malo. Incluso en un hospital de un país desarrollado no es infrecuente morir por tétanos.
En cualquier estado de la enfermedad, por grave que este sea, el paciente conserva completamente la lucidez. La enfermedad no afecta en absoluto al intelecto ni a las capacidades cognitivas.
Así que ya lo saben, especialmente si trabajan en el campo o en la industria, o en cualquier caso, vacúnense cada diez años. Cuando les curen una herida y vean acercarse a la enfermera con la jeringuilla preparada no protesten y piensen que ese pinchacito de un segundo puede significar la diferencia entre vivir o morir entre tétricos estertores. No pierdan de vista al siempre oportunista Tétanos.

lunes, 13 de febrero de 2012

Mujeres, al paritorio; hombres, al cagadero 3ª parte

Foto: B.R. el Blog de Bernar
Matémonos unos a otros, sí matémonos de una maldita vez. Perezca esta raza inmunda que somos en el degolladero entre hermanos, vecinos, amigos y conocidos, de la guerra civil que deberíamos haber consumado hace mucho tiempo, cuando la oportunidad era cierta y el viril espíritu de combate aún ardía en el corazón de los hombres. Aunque no fuera más que deseo de venganza o mezquino desquite, era mucho más noble que el lodazal de excrementos en el que nadamos ahora, a tal degeneración hemos llegado.
Pues nos hemos condenado por nuestra propia depravación y molicie a quedarnos los peores mientras los buenos huyen lejos del cagadero. En su momento tuvimos la gran oportunidad de ponernos a la altura de las naciones que se toman en serio a sí mismas, ¿qué es lo que hicimos? todos lo vieron, abandonar el país a la chusma. Entre chekas y paracuellos el aterrorizado pueblo se volvió a hartar, el clamor lo recogieron los militares que, financiados por banqueros y creyéndose salvadores, nos regalaron aquel baño de sangre y represión y la dictadura por la que algunos tanto suspiran. Volvimos a tener la oportunidad, más y mejor, y volvimos a entregar el poder a la chusma. No habíamos aprendido nada. Repetimos el esquema con obstinada testarudez y nos condenamos otra vez al guerracivilismo y a la mierda de las dos Españas. De nuevo contaban más las apariencias y los grandes gestos que los hechos y la acción. De nuevo lo más canalla del patio de Monipodio en que se convirtió una vez más el país tomaba con cínico descaro los escaños de la Corte aprovechándose de  partidos políticos debilitados por pacatas ideologías de conveniencia y paralizados por su propia mezquindad, luchas intestinas, corrupción, intereses, traiciones y miedo a perder votos. Nunca llegó la democracia completa, la de verdad, todo quedó en una partitocracia descafeinada para las masas conformistas y encantados de habernos conocido. Engañaron y engañaron y engañaron hasta que se acabó el dinero ahorrado y el prestado también, y los bancos hartos de tanto bandolero cerraron el grifo y los trileros se quedaron sin clientela a quien seguir engañando.

Foto: B.R. el Blog de Bernar
Está claro, la Historia nos lo cuenta con su fria exposición de los hechos; tardamos más o menos cuatro generaciones a volver a liarla parda, a dedicarnos con saña al asesinato colectivo. Llega un momento en el que no se le puede seguir engañando al pueblo, en el que las promesas y las buenas intenciones dejan de convencer y ni siquiera los pequeños logros calman a los timados, toda la sociedad. Ese momento en el que el rey se queda desnudo frente al pueblo y el niño pregunta en voz alta lo que es evidente. Ese momento de ajustar cuentas de una puta vez. Ese momento terrible en el que las balas empiezan a silbar por las calles sin que nadie acierte a  explicar cómo y cuándo empezó. Ese momento en el que las palabras ya están de más y en las avenidas ocupadas por los tanques estalla el sálvese quien pueda. Necesitamos la catarsis sangrienta nacional al menos una vez cada siglo. Luego no nos preguntemos si sí o si no, sino cuando será la nueva autoinmolación, conscientes de que sobreviviendo sólo los mejores una nueva población regenerada y fuerte saldrá cual Ave Fénix del rescoldo y  las cenizas.
No parece otro nuestro destino a medio plazo, eso si antes no la liamos entre todos contra China, a ver quién dispara primero. Se empieza a escuchar un rumor inquietante que sacude a las masas con una suave onda sísmica, aún leve como un viento sobre los trigales, pero insistentemente creciente convirtiéndose en implacable terremoto; secretas consignas se cruzan esquina a esquina, ciudad a ciudad, profetizando el estallido inminente de la nueva inmolación en el baño de sangre colectivo. Todo el personal harto del engaño, de las estructuras laborales y sindicales cuasi mafiosas heredadas del franquismo y mantenidas hasta la ruina con tal de tener contentos a los estómagos agradecidos de siempre, no sea que monten una huelga general para arreglarlo todo, la única alternativa que saben proponer. Ya nadie quiere escuchar más soluciones, se agotó la palabrería barata y huera, la borrachera de demagogia. La visión de tanto holgazán privilegiado calentando poltrona con sus bufardas como en una ilustración de Furillo, de tanto putero, vago y sinvergüenza incompetente agraciados con la lotería del puesto fijo, es una provocación infame, una risotada cínica, insultante y salvaje a la cara del pueblo, una bomba cargada al máximo de presión a punto de estallar con la mínima chispa.

Así que hagámoslo ya. Salgamos a las calles todos en pelotas, dando salvajes alaridos de guerra, empuñando el cuchillo grande, el hacha, el machete o el bate de béisbol, todos al tumulto orgiástico de violaciones, venganzas, asesinatos porque sí, porque hoy me he levantado con ganas de matar, venganzas de venganzas, te odio desde siempre, te mato porque me has mirado, porque me caes mal, por maricón, por drogata y delincuente, por gitano, por payo, porque fuiste mi encargado y te odio desde entonces, porque tu piba está más buena que la mía, porque tu casa es mejor, porque me jode que te vistas bien, porque tu carro es más molón que el mío. Démonos con saña a la degollina hasta el final. Por el bien de la nación. Ahoguémonos en el río de sangre y que sobreviva el mejor, lo malo es que precisamente los más canallas tambíén suelen tener una asombrosa capacidad de supervivencia. Los que queden vivos, pronto se pondrán a follar como perras y perros y engendrarán una nueva camada ignorante y brutal dispuesta, orgullosa de su zafia animalidad, a repetir la historia y encarar con renovados bríos el sino inefable que les aguarda:

Mujeres, al paritorio; hombres, al cagadero.

domingo, 5 de febrero de 2012

Los venenos más tremebundos



La ricina es mi favorito; causa en pocas horas una muerte espantosa,
entre alaridos, atroces dolores y lúgubres estertores. 
Foto: B.R. el Blog de Bernar
¡Ah, el viejo arte de envenenar! Innoble sin duda, pero a la vez elegante. Tradicionalmente, es el modo favorito de asesinar de las mujeres y de los hombres que no se sienten seguros de su propia violencia. También de quienes no desean hacer ruido y prefieren dar trabajo a la policía. El envenenamiento da innumerables ventajas al asesino que frecuentemente no llega a ser descubierto jamás. Además un buen veneno es más seguro que arriesgarse a fallar la puntería o no ser mortal el ataque, si usa uno armas de fuego, o el siempre azaroso cuerpo a cuerpo con arma blanca en el que, con la suficiente mala suerte, el asesino se puede convertir en su propia víctima.

Sí; un buen envenenador siempre hará carrera. Nada de chapuzas que acaban con la víctima en un hospital con una simple cagalera y dolor de tripita.
Puede que hayan oído hablar del sofisticado envenenamiento con Polonio, pero aunque es venenosísimo, hay sustancias muchísimo más tóxicas, cuya química parece montada por el mismo Demonio. Ya que las estadísticas de B.R. muestran un enorme interés de nuestros lectores por nuestro artículo sobre las plantas tóxicas, ahí van los venenos más activos, mortales e irreversibles que se conocen.

La toxina botulínica es el número uno de los venenos mortales, 70micro gramos ingeridos matarían a un adulto. 0.15pico gramos por vía intravenosa. Un sólo miligramo bastaría para matar a miles de personas. Es varias veces más venenosa que el gas sarín. Falla el sistema nervioso. Produce sequedad de boca, náuseas, vómitos, parálisis muscular progresiva hasta paralizar el sistema respiratorio y causar la muerte por axfisia entre espantosos dolores, aullidos y tétricos estertores.

La muerte sobreviene a las pocas horas entre diarrea sanguinolenta,
aullidos, alaridos espantosos y tétricos estertores.
Foto: B.R. el Blog de Bernar
La ricina es mi favorito, con sólo ingerir unas pocas de sus aparentemente inocentes semillas causa un fallo respiratorio y multiorgánico que lleva a la muerte en pocas horas, aunque la tremenda agonía se puede alargar hasta 10 días. La ricina produce una horrorosa hemorragia intestinal con diarrea sanguinolenta, vómitos, deshidratación e hipotensión. Causa la muerte por apoptosis. La dosis letal para un adulto es de 1mg. ingerida, la mitad si es inhalada o por vía intravenosa para los amantes de las sensaciones fuertes.

El anthrax, conocido por esa implicación en el terrorismo que nunca tuvo, puede matar por simple exposición cutánea, pero lo peor es inhalarlo. Empieza como una gripe que no mejora hasta que finalmente colapsa el sistema respiratorio. La muerte sobreviene al poco entre crueles dolores y horribles estertores.

El espantoso gas sarín sí que ha sido usado en terrorismo, en el famoso atentado de aquella estación de metro de Japón donde murieron decenas de personas. Es cientos de veces más potente que el cianuro. Sólo olisquearlo ligeramente y te saldrá espuma por la boca, entrarás en coma y morirás en minutos entre tétricos estertores. Originariamente, se sintetizó como pesticida.
Hablando de japoneses, cada año mueren en su país unas cinco personas por la ingestión de tetrodotoxina, potente veneno que se encuentra en los órganos del pez globo, consumido en Japón como fugu. El veneno aún persiste después de cocinado. En las 6 horas siguientes a su ingesta, aparece la parálisis muscular y sobreviene la muerte.

La muerte por cianuro es más perra de lo que piensa la gente. Produce
espeluznantes ataques de apoplejía y la víctima se siente arder por dentro.
Foto: B.R. el Blog de Bernar

No podía faltar en esta lista el popular cianuro. Se fabrica fácilmente y además se encuentra en la Naturaleza en muchas formas letales, como las almendras amargas. Tiene un efecto contundente, pero a diferencia de lo que creíamos por el cine, es una muerte perra y cabrona, suficientemente merecida para un criminal nazi, dado el sufrimiento extremo que produce. Empieza con dolor de cabeza, somnolencia, vértigo, enrojecimiento facial, náuseas y vómitos; de ahí se pasa a las convulsiones, midriasis, sudor frío, taquicardia y respiración débil. El paciente siente ahogo y que se quema por dentro. Finalmente el pulso se debilita, la temperatura corporal desciende, los labios, cara y extremidades adquieren un tono azulado y sobreviene el ataque de apoplejía, coma y muerte entre tétricos estertores. Todo ello en pocos minutos.

También el vapor de mercurio posee deletéreos efectos inhalado. Ataca al cerebro y los pulmones, anulado el sistema nervioso central.

La estricnina es también otro viejo conocido de las historias de crimen. Ingerida o inhalada, causa una de las muertes más divertidas, desde el punto de vista vengativo y vil del asesino. Se extrae de la nuez vómica y una dosis de 15 a 25mg. es letal para un adulto. A los 10-30 minutos aparecen los primeros síntomas: gran estimulación del sistema nervioso central con agitación, dificultad para respirar, meada de color oscuro; la estricnina provoca que todos los músculos del cuerpo sufran horribles y violentos espasmos hasta morir entre espantosos dolores por agotamiento y axfisia debido a la contractura de los músculos torácicos.

La amanita phalloides siempre ha sido un conocido método de envenenar. Resulta deliciosa en cualquier plato de setas servido a tu peor enemigo. La Amanita tiene la inoportuna cualidad de ser sabrosísima y la incauta víctima devorará las setas con gusto, ignorando que a las seis horas deberá ser hospitalizado con pocas probabilidades de salvar su vida ya que no hay antídoto. La seta contiene amatoxina, un veneno lento pero implacable que desintegra el hígado y los riñones en pocos días. El paciente permanece consciente sufriendo entre lúgubres alaridos dolores insoportables, hasta caer en coma y morir.


La estricnina no está mal y es la más divertida, aunque la verdad
yo personalmente, recomiendo el compuesto 1080: incoloro,
inodoro e insípido, mata a las dos horas entre tétricos estertores.
Foto: B.R. el Blog de Bernar
El último de la lista tiene nombre evocador, se trata del fluoroacetato de sodio, conocido como el Compuesto 1080. No tiene antídoto. Es inodoro, incoloro, insípido y soluble en agua. Casi el veneno perfecto si no fuera porque permanece activo hasta un año en los cadáveres envenenados con él. El Compuesto 1080 bloquea el metabolismo celular, lo que conduce a una rápida y dolorosa muerte. Empieza con un prurito nasal que se propaga rápidamente a la cara y extremidades. Continúa con irritabilidad, estupor, vómitos y calambres musculares. A partir de ahí, todo va en vertiginoso torbellino. El paciente entra rápidamente en coma convulsivo, con depresión respiratoria, taquicardia y muerte dos horas después de la ingestión del veneno.

Hay muchos otros venenos, vegetales,minerales y animales, algunos muy fáciles de obtener, tal vez les comente algo de ellos en otra ocasión.  Estos son los considerados más peligrosos en todas las listas de las sustancias más venenosas conocidas.
Espero que su interés haya quedado satisfecho. Como siempre, me veo en la obligación de aconsejarles prudencia en la elección de los especímenes con los que experimentar ya que el uso desmedido e irresponsable de estas sustancias podría conducirles a pérdidas irreparables, como su gato o mascota preferida. En cualquier caso, recuerden que un trabajo bien hecho ahorrará sufrimientos innecesarios, daños colaterales cuya minimización es siempre deseable y firma de un buen profesional en la materia.